Saludos a todo el mundo:
Desde Febrero de este año, Perroeducado está realizando cursos formativos a los voluntarios del CAAC (centro de acogida de animales de compañía) de Barcelona.
Es una gozada ver la aceptación que está teniendo, todo el mundo participa, se interesa y sale satisfecho con el trabajo realizado.
Se trata de una sesión de cuatro horas de teoría y otra, también de cuatro horas de práctica.
En la de teoría trato de dar una formación básica sobre el perro, su comportamiento, aprender su lenguaje, cómo darle un paseo en las mejores condiciones posibles en el CAAC, y sobre todo a “leer” al perro antes de entrar en la jaula para sacarlo a pasear.
En todas las sesiones teóricas realizadas pregunto a las dos horas si quieren parar para descansar. En casi todas, no hemos parado, prefieren seguir escuchando y absorbiendo información, y eso que normalmente hay fumadores.
Eso me lleva a pensar que lo que hago les gusta e interesa, y me llena de satisfacción por realizar un buen trabajo y sobre todo porque veo que les estoy ayudando a realizar una labor nada fácil y desinteresada por su parte, atender a los perros del CAAC.
El domingo vemos a todos los perros, jaula a jaula, para ver qué respuesta tiene cada uno al ponerse delante de él un voluntario, y cómo actuar.
Me encanta ver sus caras cuando ven en los perros las respuestas explicadas el día anterior. El comentario más común trata sobre cómo habían visto tantas veces esa respuesta y no sabían lo que significaba.
Me refiero a las señales de calma que realizan los perros en ese estado de estrés tan elevado.
En el tiempo que tengo, intento explicar todo lo que puedo sobre estas señales, porque les ayudará a respetar las inseguridades y miedos a muchos de ellos, y así evitarán posibles conductas negativas en los perros (aumento del miedo y una posible respuesta agresiva).
Me gusta, también, poderles dar a entender que no han de tener prisa en sacar a todos, porque hay casos que requieren de mucha paciencia. Sobre todo los recién llegados. En algunos casos es mejor dejarles un tiempo sin pasar por la experiencia de intentar sacarles de la jaula, sobre todo por no saber ver el estado emocional en el que está y cómo tratarlo. La necesidad que sienten los voluntarios de ayudarles a todos y sacarles a pasear a veces les traicionan.
Quiero desde aquí felicitarles a todos por la labor que realizan, que como he dicho antes, no es nada fácil. Las instalaciones, el tiempo y el clima no les permite llevar a cabo su labor en condiciones, y aún así un buen número de ellos sigue volviendo y volviendo para darles atención y cariño a los tan OLVIDADOS.
FELICIDADES Y GRACIAS ¡!
Jordi